Amor Verdadero, Libre Albedrío y la Lógica del Infierno

Tim Stratton (The FreeThinking Theist) | Traducido por Raúl Jaramillo de Lira

|

January 18, 2017

Enlace Original:http://freethinkingministries.com/true-love-free-will-the-logic-of-hell/


El muy conocido pastor evangélico, Rob Bell, ha recientemente impulsado su perspectiva acerca del infierno al centro de atención en su bestseller, “Love Wins”, (El Amor Gana), [1] Esta perspectiva es llamada “Universalismo”, porque es la perspectiva de que hay salvación universal. Es decir, el defensor del universalismo rechaza la premisa de un infierno eterno.[2] Esto  típicamente resulta  en un debate respecto al significado de ciertos verso bíblico conduciendo a un punto muerto hermenéutico. Cuando esto ocurre, ¡podemos romper este estancamiento con lógica![3]

Los Universalistas rechazan la doctrina del infierno eterno ya que ellos asumen que es lógicamente incompatible con un Dios omnibenevolente (completamente bueno y amoroso). Yo no estoy de acuerdo; de hecho, yo pienso que el concepto del infierno lógicamente se deduce y completamente tiene sentido si Dios es perfectamente bueno y amoroso. Esto es porque Dios no forzará a alguien en su presencia que no quiere estar con Él. Si Dios creó a la humanidad para conocer, amar y disfrutar una relación personal con Él por siempre, [4] Dios no forzará a alguien a hacer algo que vaya contra la voluntad de él o ella. Si Dios fuera a “secuestrar” a alguien contra la voluntad de él o ella, no sería verdadero amor. ¡Lo mejor que podríamos esperar sería algo similar al “Síndrome de Estocolmo”![5] Eso sin embargo, es un trauma psicológico, ¡no amor!

El Universalista, Morton Kelsey, ha dicho, “Decir que los hombres y mujeres después de la muerte serán capaces de resistir el amor de Dios por siempre parece sugerir que el alma humana es más fuerte que Dios”.[6] Creo que este razonamiento es confuso porque debemos por lo tanto llegar a la conclusión de que incluso si un alma humana no es más “fuerte” que Dios por la eternidad, si puede ser más poderosa por un periodo finito de tiempo. Esto simplemente es incoherente cuando consideramos a un Dios omnipotente. John Hick afirma que debido a la perfecta bondad de Dios, “Dios eventualmente tendrá éxito en su propósito de ganar a todos los hombres para sí mismo en fe y amor”.[7] Nuevamente, pienso que este pensamiento está confundido cuando consideramos a un Dios omnibenevolente y omnipotente.¿Por qué, si Dios eventualmente “ganará” a todas las almas para sí mismo, simplemente no lo hace ahora a través de su “gracia irresistible”? Si él es todopoderoso, él podría, así que ¿por qué poner a alguien a través de los sufrimientos de este mundo o a la tortura del infierno en lo absoluto?

Tal vez no es acerca del poder o fuerza, sino acerca de amor y libertad.

En mi experiencia, los defensores de la salvación universal tienden a negar que la humanidad posee libre albedrío libertario (libertariano) para hacer decisiones genuinas. Si ese es el caso, creo que sería imposible experimentar una verdadera relación de amor con nuestro Creador. Aquí el por qué: dado que Dios es completamente bueno, él es también completamente amoroso. Dado que él es completamente amoroso, él desea una relación auténtica de amor con todas las personas. Dado que él desea una auténtica relación de amor con cada ser humano, él debió darnos libre albedrío libertariano para escoger amarlo o rechazarlo. Cuando lo rechazamos, nosotros pecamos, y ¡estas transgresiones han afectado este mundo con terrible sufrimiento! Dios nos permite experimentar este sufrimiento, porque nos moldea así como también nos acerca a Él, lo cual es el mayor bien que un ser humano podría experimentar jamás (Rom. 5:3-4; 2 Cor. 4:17).

Consecuentemente, la única forma en la que Dios podría erradicar el mal y el sufrimiento sería erradicar el libre albedrío libertario. Ello entonces erradicaría la posibilidad de que alguien escogiera libremente entrar en una relación verdadera de amor con Dios. La relación de amor con Dios es el mayor bien que alguna vez podríamos experimentar; por lo tanto, ¡erradicar el mal sería malvado! Por lo tanto, es bueno que el mal y el sufrimiento fuesen posibles y permitidos por Dios.

Se deduce que si las personas son realmente libres, no hay garantía de que todas las personas libremente escogerán amar a Jesús y serán salvas. Es lógicamente imposible forzar a alguien a libremente hacer algo. A pesar de que Dios es omnipotente, esto no significa que él puede hacer lo que es lógicamente imposible. Por lo tanto, incluso si Dios creó un mundo en el cual todas las personas si escucharan el evangelio, él no podría garantizar que ellos libremente escogerían responder afirmativamente y escogerían libremente a amar a Jesús. Como William Lane Craig escribe, “Por lo que sabemos, en cualquier mundo de personas libres que Dios pudiera crear, algunas personas libremente rechazarían su gracia salvífica y se perderían”. [8]

Si alguien puede escoger libremente el rechazar la seductora revelación de Dios y las insinuaciones del Espíritu Santo (“blasfemia contra el Espíritu Santo”: Marcos 3:29; Lucas 12:10; Mateo 12:31-32) parece que es la clase de pecado que podría ser de gravedad infinita. Si uno es realmente libre, y esto no es una clase de juego de palabras, entonces es lógicamente posible que este individuo libremente rechace a Dios en un futuro infinito. Por esta razón, una separación infinita de Dios – infierno eterno – tiene sentido lógico.

Puede ser lógicamente posible que un mundo existe en el cual todos libremente escogen amar a Jesús (incluso a través de un infierno finito); sin embargo, no está garantizado que es un mundo viable para Dios crear si la libertad humana también es una condición genuina de este mundo. De acuerdo con Alvin Plantinga, puede que incluso no sea posible que Dios cree una persona sin que esta “se corrompa” (depravación transmundial); [9] por lo tanto, no deberíamos enseñar que el universalismo es verdad. De hecho, es una enseñanza totalmente irresponsable. A lo mucho, el maestro sensible enseñaría únicamente que el universalismo es una mera posibilidad, a la cual no debemos tener esperanza porque probablemente  no es realidad (esto no es como el “universalismo esperanzador” de Bell).

Por estas razones, debería de haber un rechazo universal del universalismo. En lugar de ello, uno debería mantener una perspectiva metafórica del infierno similar a lo que C.S. Lewis ofreció en su libro legendario, “El Gran Divorcio,”[10] o mantener una perspectiva aniquicionalista, la cual sostiene que la no existencia eterna es separación eterna de Dios (yo no mantengo esta perspectiva; sin embargo, tiene mucho más sentido que el universalismo).[11]  De hecho, puede que no haya otro resultado lógicamente disponible para Dios. Como J.P. Moreland ha sugerido, si es objetivamente incorrecto el extinguir un alma creada en la imagen de Dios debido a su valor intrínseco (por lo tanto, Dios no aniquilará un alma humana), y si estas almas creadas a la imagen de Dios libremente escogen rechazar a Dios eternamente, entonces lógicamente se concluye que estas almas que eternamente escogen rechazar a Dios pasarán la eternidad apartados de Él. [12] Esta separación eterna de Dios y de todo lo que es bueno es el epítome del infierno.

Tenemos razón lógica para tomar el infierno eterno seriamente justo como la biblia afirma. Por lo tanto, tenemos suficiente justificación apoyando la quinta premisa del Omni Argumento contra el Calvinismo:

1- Si el Calvinismo es verdad, a quien sea que Dios le provea “Gracia Irresistible” irá al cielo y no sufrirá el infierno eterno.

2- Si Dios es omnibenevolente, Él no desearía ni Él enviaría a alguien a sufrir el infierno eterno por elecciones que ellos eran incapaces de hacer sin la gracia irresistible de Dios.

3- Si Dios es omnipotente, él podría proveer gracia irresistible a todas las personas.

4- Si Dios es omnisciente, él sabría cómo proveer gracia irresistible a todas las personas.

5- Algunas personas sufren el infierno eterno.

6- Por lo tanto, ya sea Dios no es omnibenevolente, o no es omnipotente, o no es omnisciente (escoge al menos una), o la gracia irresistible (y el Calvinismo) es falso.

Manténganse razonables (Filipenses 4:5),

Tim Stratton


Notas:

[1] Rob Bell, Love Wins: A Book About Heaven, Hell, and the Fate of Every Person Who Ever Lived, 2011, Harper Collins e-books

[2] Yo hago un caso contra el Calvinismo y la premisa (5) dice “El infierno eterno existe”. El Universalista negaría esta premisa. Lee más en: [Link to “Los Pétalos Caen: Por qué el Calvinismo es Imposible” Translation by Raul Jaramillo]

[3] Lee mi corto artículo sobre la lógica aquí (sólo inglés):: https://apologers.wordpress.com/2015/05/04/what-is-logic/

[4] A.W. Tozer, The Pursuit of God, Stori Imprint, 2013, (21)

[5] Patrick J. Carnes, The Betrayal Bond: Breaking Free of Exploitive Relationships, Health Communications Inc., Deerfield Beach, FL (34-35)

[6] JP Moreland, The Soul: How We Know It’s Real And Why It Matters, Moody Publishers, Chicago, Il, 2014, p.169

[7] Ibíd.

[8] William Lane Craig, On Guard, Published by David C. Cook, Colorado Springs, CO, 2010

[9] Alvin Plantinga, God, Freedom, and Evil, 1977, Grand Rapids, MI, Eerdmans.

[10] C.S. Lewis, The Great Divorce, HarperCollins, 1946

[11] Crockett, Four Views on Hell, Zondervan, Grand Rapids, MI, 1992

[12] J.P. Moreland, The Soul, pg. 191

Share:

About the Author

Tim

Stratton

(The FreeThinking Theist)

Timothy A. Stratton (PhD, North-West University) is a professor at Trinity College of the Bible and Theological Seminary. As a former youth pastor, he is now devoted to answering deep theological and philosophical questions he first encountered from inquisitive teens in his church youth group. Stratton is founder and president of FreeThinking Ministries, a web-based apologetics ministry. Stratton speaks on church and college campuses around the country and offers regular videos on FreeThinking Ministries’ YouTube channel.

Learn More

More from this author