¿Podemos Elegir Nuestras Creencias?

Por Tim Stratton | Traducido por Allan Sánchez

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June 29, 2017

¿Soy responsable por mis creencias o acaso algo más me las impone? ¿Qué crees? ¿Cómo sabes que esas creencias que sostienes son buenas (sin mencionar si son verdaderas)?

Hoy en día muchos filósofos, científicos y teólogos rechazan la idea de que los seres humanos puedan tomar decisiones genuinas. Creo libremente que están equivocados, ya que parece como si poseyéramos el libre albedrío y pudiéramos tomar decisiones reales (al menos ocasionalmente). Además, como he demostrado en mi Argumento del Librepensamiemto en contra del Naturalismo, si uno niega el libre albedrío libertariano ellos simultáneamente (e inadvertidamente) rechazan el conocimiento (creencias verdaderas justificadas) obtenido a través del proceso de la racionalidad. Creo que estas son buenas razones para estar en contra y en desacuerdo con la mayoría. ¿Qué piensas (son esos pensamientos tuyos)?

Permítanme explicar por qué el precio asociado con rechazar la habilidad de pensar libremente es muy alto. Un determinista naturalista (por ejemplo) que rechaza el libre albedrío humano no tiene bases para afirmar que el naturalismo es verdadero. De hecho, es una declaración totalmente irracional—si el naturalismo es verdadero o falso. Si el naturalista resulta estar en lo correcto sobre el determinismo naturalista, es imposible para el libre albedrío existir, y se sigue lógicamente que la racionalidad y el conocimiento también se pierden. Pero, me parece que estamos usando la lógica y la racionalidad para llegar a estas conclusiones. Consideremos un argumento de apoyo:

1- La racionalidad requiere deliberación.

2- La deliberación requiere libre albedrío libertariano.

3- Por lo tanto, la racionalidad requiere libre albedrío libertariano.

Este mini-argumento depende de la palabra “deliberación”. De acuerdo al diccionario de Webster 1828, la deliberación significa:

Ponderar en la mente; considerar y examinar las razones a favor y en contra de un punto de vista para estimar el peso de la fuerza de los argumentos, o las consecuencias probables de un punto de vista, para una elección o decisión: pausar y considerar. [1]

Dada esta definición, no veo como uno puede verdaderamente deliberar sin libre albedrío. Por ejemplo, si las leyes no racionales de la naturaleza y los eventos pasados causalmente determinaron las consideraciones, exanimaciones, y estimaciones de uno, entonces uno no puede racionalmente afirmar, justificar, o proveer cualquier garantía de que sus creencias determinadas son verdaderas (incluyendo la creencia de una persona de que el naturalismo es verdadero). Si el proceso de la racionalidad es una ilusión, así también es el conocimiento.

Si la deliberación es el proceso de considerar varias razones a favor y en contra de ciertas acciones, y si este proceso implica libre albedrío libertariano, entonces esto significa que somos libres para escoger en lo que básicamente creemos. Esto se llama “voluntarismo doxástico.” [2]

No se deje intimidar por ese término. El voluntarismo doxástico es sólo una manera elegante de decir que los agentes humanos escogen sus propias creencias y que las personas poseen la habilidad para determinar lo que creen, tal que un individuo puede que escoja libremente si creer una cierta proposición o no.

Ahora bien, hay dos puntos de vista diferentes con respecto al voluntarismo doxástico: el directo e indirecto. El voluntarismo doxástico directo parece absolutamente absurdo ya que nadie podría elegir creer alguna proposición (o no) en cualquier momento dado. Por ejemplo, incluso si me ofrecieran un billón de dólares para realmente escoger creer en este mismo momento que no hay tal cosa como la realidad del pasado o que Dios no existe, sería imposible para mí para creer realmente que estas proposiciones son verdaderas. Sin embargo, yo creo que el voluntarismo doxástico indirecto es verdadero. Si es así, soy verdaderamente responsable de al menos algunas de mis creencias en el sentido que puedo ejercitar libertad en varios puntos de mi vida. Por ejemplo, puedo escoger libremente lo que voy o no voy a considerar, en cómo voy a ver un tema en particular, si estoy abierto a una línea en particular de argumentación o no, etc. William Lane Craig y J. P. Moreland resumen esta posición muy bien:

Los libertarianos afirman que hacemos a las personas responsables por lo que ellos creen (y el Nuevo Testamento parecería mandar a la gente a creer ciertas cosas y hacerlas responsables de su elección de creer o no creer), y esto requiere alguna forma de voluntarismo doxástico para ser verdadero. [3]

Los Compabilistas y todos los deterministas rechazan la idea del voluntarismo doxástico indirecto porque implica el libre albedrío libertariano para indirectamente escoger lo que ellos creerán o no creerán (esto socavaría el determinismo naturalista y teológico). Sin embargo, me parece que al negar este punto de vista, ellos admiten que lo están haciendo sin razón alguna o ninguna razón en lo absoluto. Por lo menos, no han elegido libremente creer que el voluntarismo doxástico indirecto es falso (deja que el mensaje se absorba).

El Librepensador Teísta,

Tim Stratton


NOTAS

[1] Websters 1828 Dictionary

[2] William Lane Craig & JP Moreland, “Philosophical Foundations for a Christian Worldview,” InterVarsity Press, Downers Grove, IL, 2003) Pág. 87

[3] Ibid.

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About the Author

Tim

Stratton

(The FreeThinking Theist)

Timothy A. Stratton (PhD, North-West University) is a professor at Trinity College of the Bible and Theological Seminary. As a former youth pastor, he is now devoted to answering deep theological and philosophical questions he first encountered from inquisitive teens in his church youth group. Stratton is founder and president of FreeThinking Ministries, a web-based apologetics ministry. Stratton speaks on church and college campuses around the country and offers regular videos on FreeThinking Ministries’ YouTube channel.

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